En el centro de la ciudad, en el medio de una amplia plaza, aparece en toda evidencia una imponente y maciza construcción, rodeada por un amplio foso. Es el castillo de los Visconti-Sforza de Galliate, que en el año 1476 el duque de Milán Galeazzo Maria Visconti hizo edificar en lugar de la anterior roca militar de los Visconti. Los trabajos, encargados inicialmente a los arquitectos Ambrogio Ferrari y Danesio Mainerio, debían convertir la Fortaleza en residencia de caza para la diversión de la corte milanesa. El castillo siguió con estas funciones incluso después de la muerte del duque con la sucesión del hijo Ludovico el Moro, él también aficionado cazador. La planta del edificio sigue un esquema rectangular, cuyos lados miden 80 y 108 metros. De notable importancia el muro perimétrico, que tiene un espesor de aproximadamente 3 metros y medio y una altura de 7 metros y medio, desde el cordón hasta la cumbre de las almenas. El muro está hecho a “saco”, es decir formado por dos muros externos de ladrillos con el cuerpo central rellenados con piedras, material usado y cal, así como ocurría en las mamposterías medioevales y romanas. El sistema de defensa está así formado: alrededor de las murallas hay un amplio foso –con agua que llega del canal de Codimonte, cerca Bellinzago– y a lo largo del fosado unas troneras alternadas a aspilleras. En los cuatro ángulos se elevan cuatro torreones, que se elevan más arriba de la muralla, unidos entre si por pasajes subterráneos. Hoy en día se encuentran en buen estado de conservación así como las dos entradas de la cara norte y sur, dotadas de puente levadizo. En el año 1496 empezaron los primeros trabajos de mejora del castillo, con la inclusión de amplias ventanas y la construcción de nuevos locales. Los embellecimientos y las restauraciones seguiron a lo largo de los siglos siguiente, pero los cambios más importantes a la estructura del castillo se realizaron durante el siglo XIX. A partir de este período, de hecho, la administracion cívica de Galliate y algunos privados, en parte propietarios, readecuaron los amplios locales según las diferentes necesidades y funciones. Entre otras partes, se reformó la torre noroeste del castillo y el cercano camino de ronda que, desde 1998, acogen el Museo “Angelo Bozzola”. Aquí se encuentran esculturas, pinturas y obras gráficas donadas por el artista de Galliate a su comunidad de origen. Es antecedente, sin embargo, el espacio destinado a Biblioteca Municipal en los ambientes del corredor y de la torre angular suroeste: además de los 14.000 volumenes de la biblioteca, aquí encuentran espacio más de 10.000 raras piezas entre incunables e impresos del siglo XVI.